One of america's oldest malls is closing
- HEALTH
- febrero 25, 2015
Maecenas mauris elementum, est morbi interdum cursus at elite imperdiet libero. Proin odios dapibus integer an nulla augue pharetra cursus.
READ MORELa Minigun M134, una ametralladora rotativa de seis cañones y calibre 7,62×51 mm, ha sido utilizada por las fuerzas militares y policiales en México, incluyendo su uso contra bandas de delincuentes y sicarios. La Minigun M134 ha sido empleada por las autoridades mexicanas para abatir a peligrosos criminales. Un ejemplo de su uso fue en la Operación Barcina, llevada a cabo en Tepic, Nayarit, donde las autoridades utilizaron la Minigun para enfrentar a grupos criminales, también fue usada durante el enfrentamiento con criminales en enero de 2023 en Culiacán, Sinaloa. Las características de la Minigun y que la hacen la preferida de las Fuerzas Armadas Mexicanas es en primer lugar su cadencia de fuego extrema, capaz de disparar entre 2,000 y 6,000 rondas por minuto (según la configuración). Esto crea una lluvia de balas virtualmente imparable contra personal, vehículos ligeros e incluso aeronaves. Tiene un gran poder de supresión ya que el volumen de fuego es tal que obliga al enemigo a cubrirse, impidiendo cualquier respuesta efectiva, eso tiene un impacto psicológico ya que el sonido característico y la devastación visual que produce tienen un efecto aterrador e intimidante sobre el adversario. Es un arma de “shock and awe” que es una estrategia militar que busca paralizar la percepción del enemigo y destruir su voluntad de luchar a través de un poder abrumador y demostraciones espectaculares de fuerza. Se basa en la idea de asustar y abrumar al enemigo con un ataque inicial masivo, en lugar de una guerra de desgaste prolongada. Finalmente, la Minigun es un símbolo de Poder, el poseer y operar una Minigun es una demostración de capacidad tecnológica, recursos y poderío militar. Para las fuerzas armadas mexicanas, la Minigun, principalmente la M134 Dillon Aero, es una herramienta valiosa en roles específicos: como el Apoyo Aéreo Cercano, donde la Minigun se ha visto montada en casi todos los helicópteros de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM) como los UH-60 Blackhawk, tanto en la versión l como M, en el H225M Cougar, el MI-17, el Bell 412 y el Bell 407GX ya que proporcionan fuego de supresión devastador para proteger a las tropas en tierra, cubrir extracciones o neutralizar objetivos de alto valor. Es tan extendido su uso que la secretaria de la defensa Nacional (Defensa) ha realizado algunos tecnológicos hechos en México como los siguientes: La Fuerza Aérea Mexicana (FAM) realizo un ambicioso programa de artillado de sus helicópteros con apoyo de tecnología desarrollada en México, mediante el cual se ha desarrollado afustes para ametralladoras Dillon Aero calibre 7.62mm con el fin de equipar helicópteros Bell 412, MI-17, EC-725/H-225M Cougar y UH-60 Blackhawk. La FAM ha exhibido a los helicópteros armados con esta ametralladora, que brinda protección tanto para los elementos que están en tierra como en el aire ya que pueden disparar 3.000 disparos por minuto y cada una de las aeronaves cuenta con 6.000 cartuchos para las operaciones. En ese sentido, la FAM también desarrolló un prototipo de entrenador de artilleros aéreos en helicópteros Bell 407 GX. El proyecto se desarrolló en las instalaciones de su Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico en convenio con el Instituto Tecnológico ‘José Mario Molina Pasquel y Henríquez’, la Universidad Aeronáutica en Querétaro y el Instituto Estatal de Capacitación Guanajuato, cuyo objetivo fue desarrollar una herramienta que permita mantener a los artilleros aéreos permanentemente adiestrados en este material de vuelo. Desde el 2018, la Dirección General de Industria Militar comenzó la realización de un proyecto denominado Afustes para ametralladoras Dillon Aero calibre 7.62 mm el cual tenía como objetivo diseñar y desarrollar la tecnología requerida para la fabricación de afustes y contribuir a que la Fuerza Aérea Mexicana cuente con aeronaves artilladas con armamento defensivo para incrementar la seguridad táctica durante las operaciones militares. Este proyecto se comenzó a desarrollar tras conocerse que, a finales del 2016, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público había autorizado la compra de 30 ametralladoras Dillon M134D Minigun para equipar los helicópteros Black Hawk y Mil Mi-17 de la FAM con un presupuesto autorizado de 115 millones de pesos, la M134D Minigun reemplazó a la ametralladora de propósito general de origen belga FN MAG que, con un calibre de 7,62 mm, se utilizaba hasta el momento en los helicópteros de la FAM. Anteriormente en el 2014, con la compra de los 18 nuevos helicópteros UH-60M Blackhawk, se adquirieron también dos ametralladoras por helicóptero o sea 36 ametralladoras M134. Recientemente se ha visto algunas miniguns montadas en vehículos. Por su parte algunas unidades de la Marina Armada de México las utilizan en lanchas interceptoras rápidas para combatir el narcotráfico en el mar, ofreciendo una ventaja de fuego considerable contra las lanchas de los traficantes. En enfrentamientos contra grupos criminales bien armados, la Minigun ofrece una superioridad de fuego que puede ser decisiva. Para los cárteles, la Minigun representa la cúspide del poder de fuego y un símbolo de desafío al Estado, su u uso, o la mera posesión, busca aterrorizar a grupos rivales, a la población civil y a las fuerzas de seguridad. La Minigun es un arma que, por sus capacidades extremas, ejerce una fuerte atracción para las fuerzas armadas mexicanas ya que es una herramienta táctica legítima.
READ MORELa manufactura de helicópteros representa uno de los mayores desafíos industriales y financieros. Aquí, la calidad no es solo una exigencia técnica, es un factor crítico de competitividad, reputación y permanencia en el mercado global. Esta industria no solo demanda tecnologías de punta y procesos sumamente especializados, también los más altos estándares de calidad, confiabilidad y precisión, razón por la que manufactura aeronáutica se ha vuelto fundamental para garantizar que cada componente cumpla con tolerancias extremadamente rigurosas. México se ha consolidado como un hub aeroespacial estratégico, atrayendo a más de 350 empresas del sector por su ubicación geográfica, talento especializado y capacidades industriales, de acuerdo con la agencia española ICEX. Sin embargo, la entrada y permanencia en esta cadena de suministro de alto valor no se definen por el tamaño de operación, sino por la excelencia operativa, la trazabilidad y el cumplimiento de estándares internacionales. El enfoque mexicano en manufactura avanzada, junto con la cercanía logística con Estados Unidos, ha convertido al país en un socio confiable para firmas globales que buscan eficiencia, calidad y capacidad de adaptación. Además, la formación de talento en universidades técnicas y centros de innovación ha contribuido a que cada vez más proveedores nacionales cumplan con las estrictas normativas internacionales. Entrar al mundo de la manufactura de helicópteros implica mucho más que dominar técnicas de fabricación de alta complejidad. Significa aceptar un principio fundamental: cada componente, por pequeño que sea, debe responder a un criterio innegociable de seguridad. “A diferencia de otros sectores, en la industria aeroespacial no hay margen para el error. Un defecto de fabricación, una desviación mínima en una medición o una variación no controlada en el ensamblaje puede comprometer vidas humanas”, señala Martín Quintero, Gerente Comercial Regional en ZEISS Industrial Quality Solutions. Por ello, los fabricantes de estas aeronaves solo trabajan con proveedores que demuestran una trazabilidad completa en sus procesos, es decir, que tienen la capacidad de documentar cada etapa de la producción desde la materia prima hasta la pieza final instalada en la aeronave. En la industria aeronáutica, la precisión es una necesidad. Pero ¿cómo asegurar calidad y seguridad en la construcción de helicópteros? Tecnologías como la medición por coordenadas (CMM), el escaneo 3Dy los sistemas ópticos avanzados permiten verificar con gran exactitud las dimensiones, geometrías y tolerancias de cada componente. Estas herramientas superan ampliamente las capacidades de los métodos tradicionales, asegurando que cada pieza cumpla fielmente con las especificaciones del diseño y evitando así defectos que podrían derivar en costosas fallas o rechazos. Bajo esta perspectiva, la metrología industrial avanzada deja de ser un costo operativo para convertirse en una inversión estratégica. Tecnologías como el escaneo 3D, los sistemas ópticos o las máquinas de medición por coordenadas permiten a los fabricantes validar componentes con tolerancias micrométricas, reducir retrabajos, evitar rechazos costosos y cumplir con normativas que habilitan contratos internacionales. Como señala Martín Quintero, Gerente Comercial Regional en ZEISS Industrial Quality Solutions, “la capacidad de documentar cada paso del proceso y demostrarlo con datos medibles se ha vuelto un pasaporte hacia mercados aeroespaciales globales”. Para los tomadores de decisiones, apostar por procesos de validación metrológica no solo mitiga riesgos —como incumplimientos regulatorios o fallos estructurales con implicaciones legales—, sino que acelera la innovación y permite una planeación financiera más precisa al reducir los costos ocultos derivados de errores de fabricación. Además, la integración de sistemas de medición digitalizados permite realizar simulaciones, ajustes virtuales y optimizaciones en el diseño, acortando tiempos de desarrollo y facilitando decisiones estratégicas basadas en datos. Esto se traduce en una ventaja competitiva tangible en una industria donde la agilidad y la confiabilidad determinan el éxito. La fabricación de helicópteros y, en general, la manufactura aeronáutica, es un sector en crecimiento que ofrece grandes oportunidades de negocio, especialmente en regiones como México, donde convergen talento, tecnología y visión industrial. Pero este crecimiento no está disponible para todos, solo quienes apuesten por la excelencia técnica, la seguridad sin concesiones y la innovación continua podrán consolidarse como verdaderos jugadores del futuro aeronáutico. Ser proveedor aeroespacial es, en última instancia, una declaración de principios: precisión, compromiso y la convicción de que cada detalle cuenta, porque en el aire no hay segundas oportunidades.
READ MOREPor: José A. Quevedo En la reciente escaramuza entre India y Pakistán tras los ataques terroristas en Pahalgam, se ha confirmado el primer derribo en combate de un caza Dassault Rafale. El avión con el número de serie BS-001, correspondiente al primer Rafale EH entregado a la Fuerza Aérea India (IAF), fue identificado en el estabilizador vertical de una aeronave siniestrada en las cercanías de Bathinda, estado de Punjabl, además Imágenes satelitales y registros visuales confirman el hecho. También se ha documentado la presencia de un motor Snecma M88-2 en el mismo lugar, uno de los dos que propulsan al Rafale. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Pakistán señalo que el derribo fue ejecutado por cazas J-10C de fabricación china, utilizando misiles aire-aire de alcance medio/largo PL-15E. Restos de uno de estos misiles habrían sido identificados dentro de territorio indio. Según el canciller pakistaní Ishaq Dar, “los Rafale indios fueron eliminados sin dificultad” y se comunicó de inmediato al embajador chino como muestra de coordinación bilateral. La narrativa oficial en Pakistan sostiene que su fuerza aérea se logró derribar cinco cazas indios: tres Rafale, un Su-30MKI y un MiG-29. Aunque a través de fuentes abiertas solo ha sido posible confirmar visual y geográficamente la pérdida de un Rafale y un Mirage 2000H. El derribo se produce tras el lanzamiento por parte de India de la Operación Sindoor, una campaña limitada de represalia ejecutada por la Fuerza Aérea de la India, tras el atentado que dejó 31 muertos y 46 heridos en Pahalgam. El Ministerio de Defensa de la India aseguró que la operación se limitó a destruir infraestructura de planificación terrorista, evitando atacar instalaciones militares pakistaníes para “no escalar innecesariamente” el conflicto. Durante el ataque se usaron misiles de crucero SCALP y bombas guiadas Hammer lanzadas desde cazas Rafale y Mirage 2000, además de drones suicidas Warmate entre otros. El derribo del primer Rafale de la India representa un golpe importante para su fuerza aérea con lo que se cuestiona el papel estratégico de este sistema de armas de generación 4.5 adquirida a Francia para tener un rol disuasivo frente a China y Pakistán. En el otro extremo crece la percepción de una mayor capacidad tecnológica del componente aéreo pakistaní, que ha integrado de manera eficaz plataformas de origen chino como el J-10C y sus misiles aire-aire PL-15 y PL-10. Estos cazas de manufactura china J-10CE, son armados con misiles de mediano/largo alcance PL-15E y misiles de corto alcance PL-10E, siendo las aeronaves más modernas y potentes del arsenal pakistaní. Con esto el caza Chengdu J-10C obtiene una insignia de “probado en combate” frente a un adversario occidental de última generación, una distinción no menor en el competitivo mercado internacional de defensa. Esta percepción de aparente superioridad frente a un poderoso y avanzado caza fabricado en occidente, podría impulsar la exportación de armamento chino, entre aquellos países que buscan sistemas de armas sin depender de proveedores occidentales.
READ MORE